En República Dominicana es posible conseguir formas más cómodas y legales de pagar deudas, incluso antiguas
Hay una respuesta corta y una larga para esta pregunta. Y ambas son importantes. Empecemos por la más corta: pagando.
Asimismo, si lo que deseo es que en la información crediticia que manejan las instituciones financieras en República Dominicana aparezca que yo no tengo una deuda, la única forma es pagarla a mi acreedor.
Y es importante resaltar esto porque, en la actualidad, se publicitan fórmulas mágicas que aseguran que pueden hacer que cualquier deudor, a cambio de una comisión, ya no tenga registros de deudas en los burós de créditos, sin necesidad de pagar el monto adeudado.
Y eso, según las leyes vigentes en la República Dominicana, no es posible.
Vamos ahora con la respuesta larga, paso a paso para que entiendas por qué esto no es factible. Pero sobre todo sepas que sí existen soluciones flexibles, no para barrer las deudas bajo la alfombra, sino para saldarlas en condiciones más ventajosas.
¿Qué es un buró de crédito y por qué es tan importante en mi vida financiera?
Su nombre formal en las leyes dominicanas es Sociedades de Información Crediticia (SIC), son organismos independientes que registran, almacenan y emiten información sobre los usuarios del sistema financiero respecto a los préstamos que toman; es decir, tarjetas de créditos, préstamos hipotecarios, para vehículos, para emprendimientos, personales, etc.
Desde un punto de vista más aplatanado, esto quiere decir que cuando alguien abre un crédito en un banco, este lo informa a las SIC. Cuando alguien paga una cuota también lo notifica a las SIC. Y cuando deja de pagar una cuota, ¿qué crees que pasa? ¡Exacto! También eso lo reporta a los burós de crédito.
● Alerta en amarillo para quienes tienen deudas de uno a 89 días.
● Alerta roja para quienes tienen deudas de 90 días en adelante hasta quienes han pasado al departamento legal de los bancos.
Y esto lo saben todos los bancos, de manera que, si se busca un crédito en otra institución financiera, esta hará una consulta en el buró. Y al ver que la persona está morosa, no aprobará el préstamo que está solicitando.
La morosidad solo espantará a las instituciones de financiamiento.
¿Cuánto tiempo reflejan los burós de crédito mi endeudamiento?
Toda persona que tenga un crédito en el sistema bancario dominicano tiene derecho a pedir su récord crediticio a los burós.
Lo puede hacer, de manera gratuita, una vez cada tres meses; es decir, cuatro veces al año.
Y lo pide a TransUnion y Datacrédito, las dos Sociedades de Información Crediticia que funcionan en República Dominicana.
Ahora vamos con una información legal que se puede prestar a confusión y, desafortunadamente, al engaño.
El artículo 64 de la ley 172-13 (sobre la protección integral de los datos personales) establece pautas sobre la “longevidad” de la información de las deudas:
“Para los créditos a plazo o los créditos contratados por cuotas periódicas, que estén vencidos, contratados en un plazo mayor a los cuarenta y ocho (48) meses, las Sociedades de Información Crediticia (SIC) deben presentar en los reportes las informaciones asociadas a los mismos durante un lapso transcurrido desde la fecha del último pago al crédito en cuestión, lapso que no debe ser mayor a los cuarenta y ocho (48) meses y no debe exceder la fecha de término del crédito originalmente pactado”.
Es aquí donde han intentado colarse algunos servicios de “limpieza de crédito”. Le ofrecen a los deudores que son capaces de hacer “desaparecer” deudas de hace cuatro años atrás o más.
Pero en realidad, estos servicios no están haciendo nada. Solo entregan a las personas un reporte de los burós donde no se da detalles del manejo de deudas hace cuatro años. ¡Pero la deuda no desaparece!
Si se mantiene una deuda con un banco desde hace cuatro o más años, difícilmente le van a dar crédito en otra entidad. Así que si se pretende, pasado los cuatro años, buscar un nuevo préstamo (sin pagar el añejo), los bancos van a detectar inconsistencias.
Y algo que no mencionan estos servicios es el artículo 56 de la Ley Monetaria y Financiera, que indica que la Superintendencia de Bancos guarda registros de hasta diez años. A los cuales tienen acceso los bancos del país.
Así que no, no existe la limpieza “mágica” del historial de crédito.
Soluciones reales para limpiar mi historial de crédito
Para tener una historial de veras limpio tras una deuda, incluso de vieja data, lo que hay que hacer es pagar.
Y la buena noticia es que hay intermediarios financieros, que operan bajo las leyes y la vigilancia de los organismos de República Dominicana, que se encargan de conseguir mejores condiciones de financiamiento a los deudores.
Todo ello gracias a la tecnología. De hecho, es a través de aplicaciones móviles o de páginas web que funcionan y sirven de punto de encuentro.
Así es posible que, en cuestión de minutos, consigan ventajas como las siguientes:
● Reducción de los intereses.
● Reducción del capital a pagar.
● Flexibilización de los tiempos para pagar.
● Descuentos atractivos para saldos totales.
Y estos beneficios se producen porque, en el fondo, los bancos desean que sus clientes salden las deudas.
Pero muchas veces los usuarios y los profesionales de la banca no se entienden, incluso la comunicación se entorpece con quienes trabajan en los departamentos de normalización de crédito.
Hay muchos tecnicismos, muchos procedimientos estáticos y recelos de parte y parte que hacen que las negociaciones naufraguen.
Por eso han surgido, y no solo aquí, sino en diversas partes del mundo, nuevos servicios financieros de mediación para conseguir refinanciamiento de deuda.
Y es que estas plataformas sí pueden incluso, una vez llegado a un acuerdo de pago con tu banco acreedor, presentarte opciones de financiamiento de otras entidades, con mejor tasa de interés, para que pagues más rápido y a menos costo tu deuda original a tu acreedor inicial.
Así que ya sabes que hay opciones reales para ponerte al día, saldar tu cuenta (bien a plazos, bien a saldos totales) y, finalmente, demostrar en tu historial crediticio que eres un pagador y estás dispuesto a despegar en tus finanzas.
Eso sí da confianza a los bancos, no esperar cuatro años a que cierta información “deje de estar visible”, cuando en realidad los bancos siempre saben a quién le prestan su dinero.